El horror de Dunwich

Hola a todos, buenos y ya casi días de otoño, hoy es Lunes, sí, inicio de semana, una semana más de trabajo, de estudio, de lo que sea a lo que te dediques, sí, un día difícil, pero vamos a iniciar esto con una gran reseña, el día de hoy, les presento un cuento más de Lovecraft El horror de Dunwich uno de muchos bastante bueno, y vaya que hay que hablar de este pero primero

Te dejo con los datos...

Datos

Título: El horror de Dunwich

Autor: H.P. Lovecraft

Año:1929

Número de páginas: 45 hojas (PDF)

Tiempo estimado de lectura: 1 hora 

Reseña

Este cuento es narrado de manera omnisciente siendo Lovecraft el narrador, se nos introduce a Dunwich de una manera poco común, Dunwich es ese lugar alejado de toda civilización, es aquél lugar al que puedes llegar por error si te pierdes en el camino, una locación en la cuál los árboles tienen una altura descomunal, las personas son urañas, no se detendrán a hablar contigo, lo mejor que tiene Dunwich es salir de ahí.

La razón de todo esto fueron los fenómenos ocurridos ya hace algunos años sucedió, los hechos fueron tan fuertes que las personas que viven en Dunwich no se atreven a hablar del horror que los azotó.

Fue el 2 de Febrero 1913 el día en que nació Wilbur Whateley, hijo de Lavinia Watheley, una mujer un tanto rara y conocida por su piel albina, ella era descendiente de la parte degradada, nadie tuvo conocimiento del nacimiento del chico, ya que no hubo doctor o partera que pudiera presenciar tal acto, sólo un grito desgarrador de aquella mujer.

El hijo que tuvo era poco parecido a ella, tenía una tez morena y facciones de chivo, las personas empezaron a especular quién podía ser el padre de aquella criatura, a la madre del joven Wilbur no le molestaba para nada que hablarán de ello, algún día todos escucharían a aquél joven gritar el nombre de su padre en la colina de Sentinel Hill.

Sólo dos personas conocieron a Wilbur al mes de nacido, uno de los Whateley los había visitado, con el mero motivo de la venta de ganado vacuno, Mammie Bishop acudió sólo por curiosidad, la cantidad de vacas que compraban los Watheley no tenía coherencia, muchos de los vecinos subían a observar el ganado, pero esté se encontraba en precarias condiciones, estaban desnutridos y con llagas en el cuerpo, ellos lo relacionaron a una plaga dentro de la granja.

Lavinia recobró la salud después del parto y volvió a sus actividades, por su parte el pequeño Wilbur comenzó a caminar, parecía desarrollarse a un ritmo sin precedentes para un bebé, puesto que en menos de un año ya podía hablar de manera coherente y fluida, la fuerza y vitalidad que el niño tenía era totalmente opuesta a la que reflejaba la madre y el abuelo del chico.

Las facciones del niño, y su peculiar desarrollo hicieron que las personas del pueblo le tuvieran una especie de miedo, a él y a su familia, muchos relacionaban al niño con el brujo Whateley, aquél brujo que lanzó oraciones en la montaña conjurando a un ser llamado Yog Sothoth.

El tiempo pasaba poco a poco, Wilbur tenía una energía impresionante, los perros no dejaban de ladrar cuando se acercaba, era como si algo fuera de este mundo estuviera dentro del muchacho, su abuelo había empezado a construir nuevas habitaciones dentro de la casa, habitaciones que no parecían tener un uso ya que los tres habitantes podían vivir sin problema alguno, uno de lo s vecinos al momento de vender ganado a los Watheley pudo percibir un hedor horrible dentro de la granja y de la casa, era un olor fuera de este planeta, olor que sólo podía percibirse en las montañas dónde el brujo lanzaba hechizos.

Los fenómenos naturales iban en aumento dentro de Dunwich, todos los atribuían al brujo Watheley, los ruidos dentro de las colinas eran cada vez más y más fuertes.

Los meses pasaron, las habitaciones fueron construidas, el pequeño Wilbur seguía creciendo a un ritmo anormal, su abuelo lo había inmerso en los libros de hechicería de los que era poseedor.

Al cumplir los 4 años Wilbur ya tenía las caracteristicas de un joven de 15, el vello había empezado a aparecer y su voz había enronquecido, los sonidos en las montañas iban en aumento, el viejo brujo sentía que la muerte estaba por alcanzarlo puesto que aves de rapíña se arremolinaban cerca de él.

La muerte alcanzó al viejo en la noche, Wilbur había acudido por el doctor más cercano, este fue con desgano, las historias de los Watheley eran horribles, aquél anciano estaba por dejar el mundo de los vivos, pero antes de partir le pidió a Wilbur que no dejará de alimentar a aquello que yacía con él, tenía que seguir construyendo en la granja y alimentarlo cuidando la cantidad, ya que si explotaba en pedazos los esfuerzos habrían sido en vano, su misión ahora sería esperar a Yog Sothoth.

El viejo dejó el mundo con esa advertencia, el ambiente que se había generado alrededor era de un terror total, la hija del brujo lloró la muerte del viejo, Wilbur rió con ánimo de terminar lo que el abuelo había comenzado.

Ahora Wilbur se había inmerso en los libros del viejo, trataba mal a su madre hasta el punto en el que ella le temía, la madre de Wilbur desapareció despulpes de unos días, nadie quiso preguntar por el paradero de ella, muchos ya presentían lo que había pasado, el chico ahora leía todos los libros y mantenía contacto con las bibliotecas más grandes del país, pero ninguna de estás pudo brindarle  uno de los libros que necesitaba desesperadamente, El Necronomicón en su versión latina, el era poseedor de la versión inglesa pero necesitaba el conjuro de la página 751, con la ayuda del bibliotecario pudo encontrar información de Yog Sothoth, el era el guardián de una puerta, la llave de la puerta y la puerta en sí, sólo el conocía el destino del tiempo y lo que sería para los humanos, las relaciones se extendían hasta el poderoso Cthulhu quién es su primo.

El bibliotecario pudo relacionar lo que leía con los fenómenos paranormales relacionados a la familia de Wilbur por lo que no permitió que este se llevara el ejemplar del Necronomicon, Wilbur educadamente se retiró del lugar esperando que en Harvard pudieran darle la oportunidad de tener el libro. Pasó el tiempo y aquél bibliotecario  (El Doctor Armitage) que había negado la petición de Wilbur fue despertado por el ruido del asalto a la biblioteca, el pudo reconocer el hedor que se desprendía del asaltante, era el olor de aquél joven que quería el Necronomicón Wilbur yacía en el suelo moribundo, aquél hombre había perdido todo rasgo de la raza a la  que pertenecemos, su piel ahora era similar a al de un reptil y la parte baja del cuerpo ahora eran tentáculos nada en este mundo podía tener lo mismo que este hombre.

Wilbur falleció muerto de miedo al no poder cumplir la voluntad de su abuelo.

Es aquí cuando el terror surge en Dunwich un ser monstruoso salió de la granja de Wilbur, las personas que se habían peleado por la herencia no tuvieron nada más que reclamar, las cosas empezaron a ir de mal en peor, aquél monstruo aterrorizaba a los habitantes matando al ganado, y destruyendo las granjas, no había persona que se atreviera a salir en las noches por temor a toparse con un ser amorfo escondido en la noche.

Armitage encontró en las pertenencia de Wilbur un diario, este diario estaba codificado, tardó meses en descifrar las cosas que este tenía escrito un terrible mal estaba por llegar a la Tierra y aquél anciano se sentía en la necesidad de evitar el caos dentro del planeta, Dunwich se había sometido a aquél monstruo quién dejó de alimentarse sólo del ganado, pronto algunos de los habitantes habían muerto, todo apuntaba a que "eso" les había arrebatado la vida.

Armitage junto con sus colegas se habían decidido a hacer frente a aquella abominación que yacía en los barrancos de Dunwich, el necronomicon lo había invocado y esté les ayudaría a salvar al planeta. El duelo tuvo lugar en las montañas dónde el viejo lanzaba conjuros para invocar a aquellos seres, era casi invisible para el ojo humano, el Dr Armitage había elaborado polvos que lo harían visible a los ojos humanos, los pobladores de Dunwich que vieron la abominación describieron a un monstruo con tentáculos, enormes, y cada tentáculo poseía una boca, Armitage y los que habían subido con el comenzaron a lanzar un cántico que retumbo en las montañas, los hombres mantuvieron su valentía hasta el último momento, habían vencido, y el hijo de Yog Sothoth había muerto, en algún momento la amenaza volvería y Dunwich albergaría a estos seres.

Vaya que ha sido una gran reseña, y el libro completo alberga más detalles, atrévete a entrar en este mundo lleno de monstruos inimaginables, la narrativa de Lovecraft te dejará fascinado, escribió para la posteridad y su legado nunca caerá.

Ahora... 

Un poco del autor

Fue un escritor estadounidense, creador de tantos monstruos, es considerado el padre del horror cósmico.

Comentarios finales y recomendación

Lo sé, lo sé esta entrada ya está muy extensa pero vale la pena decirte que es un gran cuento y te recomiendo enteramente que le dediques un fin de semana te va a mantener entretenido y despertará tus ganas de conocer todo el mundo de este gran autor, para terminar, la canción recomendada este día es: Forty six & 2 por Tool espero que la disfrutes.

Sin más que agregar te deseo un gran día y nos leemos el miércoles :D